Golpe a la brujería chavista: llega “la guerra espiritual“

Las estatuas de Hugo Chávez son derribadas en toda Venezuela. Maduro ordena un despliegue sin precedentes para custodiar las pocas que quedan en pie como esta en la isla de Margarita. A la mayoría de los jerarcas chavistas le aterra el derribo de sus estatuas, ¿es por una carga simbólica o creen que tienen un poder mucho mayor? En mi libro Los brujos de Chávez destapo cómo la brujería y la santería cubana penetró hasta los altos estratos del poder en Venezuela y cómo el propio Chávez utilizó los monumentos de la nación para hacer trabajos de brujería para mantenerse en el poder, según confesaron personas íntimas y del entorno de Chávez Al margen de que estos hechizos o trabajos como se le conoce en ese mundo, puedan tener un efecto real o no, son muchos jerarcas chavistas, comenzando por Maduro, que creen en su poder Por eso, junto a la batalla política, ya ha comenzado en Venezuela la guerra espiritual El ex ministro de la Defensa, Raúl Baduel, amigo y compadre de Hugo Chávez, fue uno de los primeros que se percató de que en los altos estamentos militares y políticos del país estaba penetrando la brujería y la santería. Entrevisté en dos ocasiones al general Baduel en la prisión de Ramo Verde, en Caracas, en el año 2013: una en abril y otra en octubre. En su celda, me confirmó lo que desde hacía meses estaba investigando. Fidel Castro percibió en Hugo Chávez una debilidad: su carácter profundamente supersticioso y entonces lo rodeó de babalawos, es decir, sacerdotes, de la santería cubana. Fidel Castro usó a sus babalawos para manipular y también para espiar y controlar a Chávez y al chavismo. Y al final la santería, la brujería y el espiritismo llegaron hasta el propio Palacio Presidencial de Miraflores. En este video también entrevisto a Araminta González, una de las mujeres que protestó en 2014 contra el régimen de Maduro y que ideó un plan para vandalizar algunas estructuras que contienen --según la creencia popular-- trabajos de brujería o santería. Araminta fue enviada a un centro de “reeducación“ donde fue obligada a venerar a Chávez. Las historias de brujería y santería en el palacio presidencial en Venezuela están contadas en mis dos libros: Los brujos de Chávez y El dictador y sus demonios. Están disponibles en Amazon. Y puedes comprarlos aquí: