Esta es cómo Santa María hizo, en Rocamador,
descender una candela a la vihuela del juglar
que cantaba ante Ella.
Todos cuantos esperamos su bien debemos
alabar a Santa María, cantando y con alegría.
Y, por esto, un milagro os diré, y lo oiréis con gusto.
Lo hizo en Rocamador la Virgen Santa María,
Madre de Nuestro Señor. Ahora escuchad
vosotros el milagro y nosotros vamos a contároslo.