SEGUNDA GUERRA MUNDIAL, EXPERIMENTOS SOBRE INSEMINACIÓN ARTIFICIAL

Durante la Segunda Guerra Mundial, se llevaron a cabo experimentos sobre la inseminación artificial para disipar preocupaciones sobre la disminución de la tasa de natalidad en varios países y la necesidad de mantener una población fuerte, incluyendo un número suficiente de posibles soldados. Estos experimentos se centraron principalmente en el desarrollo de técnicas de inseminación artificial con el objetivo de aumentar la tasa de natalidad de individuos sanos y físicamente aptos. Un aspecto importante de estos experimentos fue la preservación del esperma. Los investigadores trabajaron en métodos para obtener, almacenar y transportar esperma para garantizar su viabilidad y eficacia para la inseminación artificial. Esta investigación contribuyó al desarrollo de técnicas de bancos de esperma, que se convirtieron en una herramienta importante en el tratamiento de la fertilidad y la medicina reproductiva después de la guerra. La