Algunas personas que se escudan como comunicadores o activistas de redes, en la práctica son es altoparlantes de maletín al servicio de los mercenarios narco paramilitares que se hacen llamar disidencias de las FARC, reproduciendo lo que piensan, planean y ejecutan en contra de la población. Culpan a otros con el objetivo de desviar la atención, buscando que las fuerzas armadas del estado copen territorios que a ellos les interesan y les sirvan de escudo protector, mientras ellos en otras zonas realizan acciones violentas en contra de los habitantes del pueblo araucano.
¡El pez muere por su boca!
Nuevamente hacemos un llamado a la población del oriente colombiano a no dejarse confundir, a resistir, luchar por su tierra y su vida amenazada por esta otra expresión narco paramilitar.
El ELN ha estado y estará cumpliendo su consigna de “SIEMPRE JUNTO AL PUEBLO”.